Especialistas del Departamento de Arqueología de la Oficina del Conservador de Trinidad, Patrimonio Cultural de la Humanidad, hallaron aquí elementos de la antigua calzada que enlaza a la Villa con la Ermita de Nuestra Señora de la Candelaria de La Popa.

Leonel Delgado Ceballo, jefe del equipo de investigadores, precisó a la ACN que con los estudios de campo se descubrió toda la calle de piedra empotrada del añejo vial, construido en 1847, que enlazaba la parte alta al norte de la urbe con la Iglesia, ubicada en el lateral derecho de un antiguo Hospital Militar del siglo XVIII.

Argumentó Delgado Ceballos que el hallazgo arrojó mucha evidencia sobre los muros de mampuesto protectores de la calzada, suceso fortalecedor de la tesis sobre el amplio uso de esa tecnología de construcción en la otrora villa de la Santísima Trinidad.

También fueron descubiertas losas de barro de 25 centímetros en su largo y ancho que en su momento conformaron las aceras del vial.

Completado el descubrimiento, los especialistas del Departamento de Arqueología de la Oficina del Conservador de Trinidad iniciaron la restauración arqueológica de la calzada y sus obras acompañantes, un motivo más de interés para los lugareños y visitantes nacionales y foráneos que lleguen hasta la urbe.

La calle empedrada matizará el ambiente colonial de la ermita, edificada en 1716 y dedicada a la Virgen de La Popa con una fachada de influencia barroca que la hace majestuosa.

En el año 1812 un ciclón causó daños importantes a la iglesia y la misma fue reconstruida en el mismo escenario geográfico donde nació y que hoy funciona como mirador de lujo para contemplar las puestas del sol, una de las bondades del Hotel La Popa, un Cinco Estrellas de Cubanacán de estreno, localizado a metros de la edificación religiosa.