Ahora mismo lo que más expectativas genera en los liderazgos históricos es el cachumbambé entre Frederich Cepeda y Yordanis Samón en el escalafón de los tubeyes.
El Gallo mayor ha disparado cuatro y es esa la cantidad que lo mantiene por delante del «trotamundos», quien no ha largado ninguno en la actual temporada, cosa rara en él, experto en ese tipo de conexiones.
El propio Cepeda será el tercero en ingresar en el club de las 1500 carreras anotadas. Con las ocho veces que ha pisado la goma se colocó a 23 de esa cifra, a la que solo llegaron Enrique Díaz (1638) y Omar Linares (1547).
También el espirituano de los cuatro Clásicos (difícil de entender que lo hayan privado del quinto) parece destinado a convertirse en el segundo con 2500 jits en series nacionales: le faltan 66. Entre este torneo y la liga invernal podría compilar esa cantidad e incluso superar los 2502 del legendario Dánel Castro.
Otro Gallo, Yunier Mendoza, silencioso, siempre por debajo del radar mediático, anda por 2375 incogibles y Samón compila 2356. Serán, sin dudas, el tres y cuatro en el club de los 2400.
Sigan además a Alexander Ayala, quien necesita 10 imparables para 1800; y a mil podrían arribar Guillermo Avilés (974), Yariel Duque (971) y Andrés de la Cruz (966).
En jonrones Alfredo Despaigne ya registra 270 con los siete de este año. Si juega la mayoría de los partidos y se lo propone, en una temporada de tan baja calidad en el picheo y él tan sobrado en el swing «buscacercas» podría pegarse y hasta llegar a los 300.
Hay una reñida porfía entre cuatro bateadores por completar las cien pelotas empinadas: Duque (97), Ariel Sánchez (96), Yordanis Alarcón (95) y el ex Grandes Ligas Alexei Ramírez (92).
Entre los lanzadores, lo más atractivo es que dos amigos andan disputándose el liderazgo de más juegos ganados entre los activos. Son Alberto Bicet y Danny Betancourt, ambos con 163.
Enfocados en ingresar en el listado de los ganadores de cien partidos están Dachel Duquesne (95), Alaín Sánchez (94) y Leandro Martínez (93).
Con un juego más que pudiera trabajar Yoennis Yera, contratado en el extranjero, firmaría los tres ponches con los cuales sumaría 1200. A igual cifra debe llegar Vladimir Baños (1188).
De lo demás, recordar que cada juego salvado por José Ángel García será una marca, casi insuperable, al menos en estos tiempos. Si 300 parecen la distancia entre la Tierra y la Luna, cada uno que sume pone millas a la brecha con los demás taponeros. Yanielquis Duardo, el segundo entre los activos, llegó ahora a 80 rescates.
Información de Cubahora y colaboración del estadístico Benigno Daquinta.
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